Falla Liquiñe Ofqui
Geología que atrae en el desarrollo turístico de la Región de Los Ríos
En la hermosa Región de Los Ríos, se encuentra la famosa Ruta de los Siete Lagos. La cual consiste en un recorrido turístico compuesto por lagos, volcanes y termas naturales. Su origen está vinculado a la dinámica interna de la tierra.
Bajo los bosques templados, volcanes activos y termas, nos encontramos con la Falla Liquiñe Ofqui. Esta falla inicia una serie de procesos geológicos que modelan parte del sur de Chile, especialmente en zonas como el Huilo Huilo.
Falla Liquiñe Ofqui: El Corazón Geológico de Huilo-Huilo

La zona de Falla Liquiñe Ofqui (ZFLO) es un sistema tectónico activo, que corresponde a un conjunto de fallas geológicas. Se extiende por aproximadamente 1.200 kilómetros a lo largo de la Cordillera de los Andes. Comenzando en la Región del Biobío hasta el Golfo de Penas, en Aysén. Esta falla es del tipo cortical, por lo que se genera en medio de una placa tectónica y no en la unión entre dos placas distintas. Los bloques de esta falla se desplazan a lo largo de un plano norte-sur, con un desplazamiento lateral dextral. Esto significa que se desliza en sentido de las agujas del reloj.
La presencia de la zona de la Falla Liquiñe Ofqui ejerce un importante control sobre la configuración del paisaje del Sur de Chile. Controla el trazado de ríos, ubicación de lagos y la formación de fiordos. Además, favorece la aparición de termas y manantiales. También, define la localización de los volcanes activos en la zona Sur del País.
¿Como influencia la falla al destino turístico Huilo Huilo?
La Reserva Biológica Huilo Huilo, ubicada en la localidad de Neltume, en la Región de Los Ríos, se encuentra dentro de la zona de influencia de la Falla Liquiñe Ofqui, un sistema tectónico activo que ha desempeñado un rol fundamental en la configuración del paisaje local. Esta falla facilita el ascenso de magma y fluidos hidrotermales desde el interior de la Tierra, lo que explica la presencia de actividad volcánica cercana (como el Volcán Mocho-Choshuenco) y la existencia de aguas termales en la zona.
Además, la actividad tectónica ha moldeado el relieve a lo largo del tiempo, dando origen a montañas, valles y saltos de agua característicos del área, como el Salto Huilo Huilo y el Salto del Puma, que hoy en día son algunos de los principales atractivos turísticos del destino.
El origen de los Siete Lagos
Los Siete Lagos se caracterizan por estar influenciados por falla Liquiñe Ofqui. Esta falla contribuye a la actividad volcánica de la zona y a la formación de numerosas fuentes termales que enriquecen el paisaje natural. Cada lago del circuito posee características propias que lo distinguen. Los lagos son alimentados por la cordillera de los Andes, incluyendo las aguas que vienen de los lagos Lácar y Nontué en Argentina. Luego, esa agua sigue su camino hacia el océano Pacífico por el río Hua Hum mediante una compleja red hidrográfica.
En términos geológicos, los lagos tienen un origen principalmente glaciar, es decir, se formaron hace miles de años durante las glaciaciones, producto de la erosión provocada por el avance y retroceso de grandes masas de hielo. Esta acción glaciar dio forma a valles en “U”, que luego se llenaron de agua al retirarse los glaciares, originando lagos profundos, alargados y con características similares a los lagos-fiordo. Además del modelado glaciar, estos lagos han sido influenciados por procesos volcánicos, tectónicos y antrópicos, que han modificado su entorno y condiciones naturales a lo largo del tiempo.
Los 7 lagos en el sur de Chile están conformados por Calafquén, Pullinque y Pellaifa, Neltume, Pirehueico, Panguipulli y Riñihue, se distribuyen dentro de la comuna de Panguipulli.
Lago Calafquén
El lago Calafquén se ubica en el sector norte de la región de la Araucanía, extendiéndose hacia el sur en la región de Los Ríos, en la comuna de Panguipulli.Este lago tiene una superficie de 120,6 km², con una longitud máxima de 25 km y un ancho máximo de 7,7 km. Es de origen glaciar y presenta siete pequeñas islas.
Entre las islas más destacadas se encuentran Trailafquén, Balboa, Los Monos y Las Cuevas, que aportan un encanto especial al paisaje. Su principal afluente es el río Llancahue. El río Llancahue drena el lago y contribuye al flujo de agua hacia el sistema de cuencas vecinas.
Lago Pullinque
El lago Pullinque se ubica en el sector norte de Panguipulli y tiene una superficie de 5,7 km². Es un lago de origen glaciar, rodeado de cerros modelados por la acción del hielo. En su superficie destacan varias islas dispersas. Su nivel de agua fue elevado de forma artificial para abastecer la central hidroeléctrica Pullinque. Además de su importancia energética, este lago es un refugio para aves migratorias. Su principal afluente es el río Hueninca, que contribuye al flujo de agua que mantiene el nivel del lago y conecta diferentes cuerpos de agua en la región.
Lago Pellaifa
El lago Pullinque se ubica en el sector norte de Panguipulli y tiene una superficie de 7,2 km², con una profundidad máxima de 9,3 m. Es un lago de origen glaciar. Está alimentado por fuentes de agua termal, lo que le otorga temperaturas más cálidas, haciéndolo un lago templado. Se caracteriza además por haberse formado como resultado de derrumbes provocados por el terremoto de Valdivia en 1960. Está rodeado por cordones precordilleranos. El lago drena por su extremo oriental a través del río Llancahue, un afluente corto de tan solo 5,6 km, que lo conecta directamente con el lago Calafquén.
Lago Neltume
El lago Neltume se ubica en el sector este cordillerano y tiene una superficie aproximada de 9,7 km², con una profundidad máxima de 212 m. Es un lago de origen glaciar. Este lago posee dos afluentes importantes: el río Cuacuá por el norte y el río Chanchán por el sureste. Presenta una gran importancia ecológica, ya que se encuentra el humedal de Cua Cua. En este humedal es posible observar flora y fauna nativa.
Lago Pirehueico
El lago Pirehueico se localiza a 68 km al sureste de Panguipulli, en el sector cordillerano oriental. Tiene una superficie de 30,45 km², una profundidad máxima de 145 metros.
Se encuentra a una altitud de 586 m y posee un origen glaciar. Sus aguas, de tono azul verdoso y transparencia, presentan temperaturas que van entre 6,5 °C en invierno y 18 °C en verano.
El lago está rodeado por la cordillera de los Andes y se sitúa sobre una falla geológica activa. Esta misma estructura tectónica también incluye a los lagos Panguipulli, Nontué y Lácar. Estos dos últimos se encuentran en territorio argentino. El principal afluente del lago es el río Hua-Hum, el cual drena las aguas del lago Lácar y cruza la cordillera hacia el oeste.
Lago Panguipulli

El lago Panguipulli se ubica en las zonas centro y sur de Panguipulli, con una superficie de 116,05 km². Tiene una profundidad máxima de 268 m y está localizado a una altitud de 130 msnm. Es de origen glaciar y está rodeado por la Cordillera de los Andes. El lago presenta aguas de color turquesa. El lago Panguipulli vierte su agua en el lago Riñihue a través del río Enco, que conecta ambos lagos. Este río permite que el agua fluya desde Panguipulli hacia Riñihue, manteniendo la conexión natural entre ellos.
Lago Riñihue
El lago Riñihue se ubica entre las zonas centro y sur de la Región de Los Ríos. Presenta una forma subrectangular y pertenece al tipo de lagos-fiordos, contenidos en valles glaciares en forma de U. Tiene una superficie de 77,5 km², un largo aproximado de 72 km y un ancho máximo de 5 km. Su profundidad máxima alcanza los 323 metros. Es un lago de origen glaciar, con aguas azul verdoso y muy transparentes. La temperatura de sus aguas varía entre los 7 °C en invierno y los 20 °C en verano. Su principal afluente es el río Enco.
El origen de las termas, un importarte destino turistico
Las aguas termales consisten en aquellas que emanan a la superficie terrestre con una temperatura al menos 4ºC más alta que la temperatura media anual de la localización donde se encuentran. Estas pueden clasificarse según su contenido de sales disueltas. Algunas categorías comunes incluyen aguas sulfurosas, alcalinas, salinas, con alto contenido en hierro o con presencia de carbonatos, entre otras combinaciones.
También se clasifican según su temperatura. Las aguas frías tienen menos de 20 °C. Las hipotermales van entre 21 y 35 °C. Las mesotermales entre 35 y 45 °C.
Por último, las aguas hipertermales superan los 45 °C. Esta clasificación ayuda a comprender sus propiedades terapéuticas, su origen geológico y el tipo de uso que pueden tener en centros termales
Las características geológicas de Chile, junto con la existencia de cadenas de volcanes en gran parte del territorio, permiten la aparición de aguas termales en el país. En el sur de Chile, específicamente en la región de los Ríos. La existencia de estas termas está dadas gracias a la actividad volcánica y a la falla de Liquiñe Ofqui.
¿Por qué la falla de Liquiñe Ofqui da vida a las termas de la zona?
Esta falla, formada por múltiples fracturas, permite a lo largo de su extensión, la filtración de agua de lluvia y nieve hacia el subsuelo. Esta agua meteórica desciende por las grietas y se calienta debido al alto gradiente geotérmico local. Es decir, a mayor profundidad, mayor temperatura. Posteriormente, el calor y los fluidos a alta presión ascienden a la superficie por las mismas fracturas. Este proceso natural da origen a las aguas termales.

Entre la región de Los lagos y la región de Aysén se encuentran más de 70 fuentes termales, que presentan una variedad de temperaturas que varían desde los 20°C hasta los 80°C. Entre la Región de Los Ríos y Aysén se localizan 25 fuentes termales. La mayoría de estas son cloruradas, sulfuradas, sódicas y neutras. Estas aguas van de entre 23°C y 84°C, lo que las clasifica como hipertermales.
En el caso de Panguipulli, se encuentra el complejo más grande de aguas termales en Sudamérica, llamado Ruta Termal. Este complejo cuenta con 23 centros, ubicados entre Liquiñe y Coñaripe. En el Huilo Huilo, se encuentran dos complejos termales principales, Termas del lago y Termas Rañintulelfu. Esta última se destaca por sus aguas a temperaturas superiores a los 70°C. Sin embargo, también existen aguas con temperaturas más moderadas, entre 37°C y 40°C, ideales para el baño.
El terremoto de 1960: Una cicatriz sísmica
El domingo 22 de mayo de 1960 quedo grabado en la memoria de los chilenos y del mundo. Ese día, el sur del país fue sacudido por un terremoto de magnitud 9.5 en escala de Richter. Es considerado el más fuerte en la historia de la humanidad. La ruptura comenzó al norte de Valdivia y avanzó hacia el sur del continente. Se origino por la subducción de la Placa de Nazca bajo la Placa Sudamericana y se relacionó con el reactivamiento de la falla Liquiñe Ofqui.
Este movimiento telúrico afecto desde la península de Arauco hasta la península de Taitao. Generando un maremoto que devastó zonas costeras como Valdivia, Corral, Puerto Saavedra. También se registraron daños en Isla Mocha, Maullin, Ancud, Castro y otras localidades del sur. La ciudad de Valdivia se hundió cerca de 4 metros sobre el nivel del mar, este evento provocó la erupción del volcán Puyehue. Uno de los efectos más críticos ocurrió en el Lago Riñihue, donde un deslizamiento de tierra bloqueo su desagüe. Durante ese momento se temía una inundación masiva hacia Valdivia, pero gracias a una operación nacional permitió drenar el lago a tiempo y evitar el desastre.
El terremoto no solo tuvo consecuencias para Chile, si no que fue percibido en gran parte del Cono Sur. El tsunami cruzó el océano Pacífico y alcanzó países como Hawái y Japón. En el sur de chile se generó graves daños en ciudades, pueblos y paisajes naturales. Pero este sismo fue clave para el desarrollo de las ciencias de la tierra, al ocurrir durante una revolución científica. Hasta ese momento, se creía que la corteza terrestre era fija. El modelo dominante explicaba la formación de relieves por contracción y hundimiento de la corteza. Sin embargo, el sismo de Valdivia y Alaska (1964) cambiaron esta visión, ayudando a demostrar que la corteza no es estática ni se mueve por contracción. Permitiendo demostrar la teoría de la tectónica de placas.